Nadie
desconoce la importancia y el auge vertiginoso de la telefonía móvil en nuestra
sociedad, día a día este tipo de tecnología ha dejado de ser exclusivo para
algunas personas y empieza a ser necesidad para otros. En la actualidad, no son
sólo los adultos los que utilizan estos artefactos; niños y jóvenes inician
desde edad temprana a reconocer de manera natural las ventajas de contar con un
celular en su cotidianidad. Estos jóvenes y niños que son ahora catalogados
como miembros de la generación conectivista, como nativos digitales cuentan con
inteligencia audiovisual: una inteligencia que no sólo les sirve para ver
televisión, sino también para generar diferentes tipos de análisis frente a
otras tecnologías, al mismo tiempo.
Los
niños que son nativos digitales, aquellos que han nacidos inmersos en la
tecnología: esta generación atiende a varias distracciones tecnológicas, al
contrario de las generaciones anteriores las cuales, siguen un orden
secuencial. Estos jóvenes conectivistas, emplean de una manera diferente a como
fuimos educados tal vez nosotros. No es raro observar ahora como nuestros hijos
aprenden de la pantalla y ya casi no de los textos, por lo tanto es fundamental
que los padres estén muy pendientes de los que se está leyendo o viendo detrás
de estas pantallas, independiente de referirse a Televisor, Computadores o
móviles, el exceso de información que se transmite en estas tecnologías es
simplemente mágico e inigualable.
Entendiendo
como conectivismo: una teoría de aprendizaje para la era digital, “El Escritorio Digital del Docente”: “El
conectivismo intenta explicar el cómo aprendemos, pero tiene implicaciones que
van más allá del aprendizaje. Cobijan aspectos de la vida como: gestión y
liderazgo, medios de noticias, gestión del conocimiento personal, diseños de
entornos de aprendizaje. Es entonces cuando el aprovechamiento de cada uno de
las aplicaciones del móvil, les permite a algunas personas, que sea este recurso
indispensable en su cotidianidad, los jóvenes y niños, los que sin interesarles
o tener temores de estropear alguno de los dispositivos, empiezan a juguetear
con cada uno de los botones o a cliclear en las pantallas táctiles; al
contrario de otros usuarios, que presentan miedo, porque se piensa en la idea
equivocada, de que si se da clic en algún icono, tal vez se desconfigure el
dichoso aparato. Al contrario son ellos los que sacan de apuros a los
adultos cuando tal vez se desconoce de alguno de los aplicativos que presenta
dicho artefacto o porque no denominarlo “ventana mágica”. Esta es una realidad
que no se debe desconocer.
Gracias
a este temor y al avance en la sociedad del conocimiento, algunas instituciones
se han empezado a preocupar por los inconvenientes presentados al llevar los
chicos los móviles a sus aulas.
No
es de desconocimiento para nosotros, como padres o docentes en ejercicio, que
en numerosas instituciones educativas está prohibido llevar el celular al
colegio ya que los estudiantes no se concentran en las clases, se distraen por
estar empleando el celular.
El
involucrar el celular en aulas o en las diferentes clases, implica de un cambio
de paradigma a nivel social, médico, educacional y tecnológico.
A
nivel Social, porque como miembros de la comunidad educativa (siendo padres,
docentes, estudiantes...) es un deber ser capaz de educar a jóvenes, niños, y
porque no adultos, en el uso adecuado del celular, a ver este dispositivo como
algo favorable, que puede contribuir de manera positiva y no negativa en los
colegios y universidades.
A
nivel médico, lo que para muchos es solo adicción al empleo excesivo del
celular o miedo de estar sin móvil, es lo que se ha denominado hoy “nomofobia”,
la fobia al no móvil.
A
modo de reflexión a nivel educacional y tecnológico, las instituciones deben
empezar a comprender que no deben alejarse de esta tecnología, sino -al
contrario- involucrarla en sus procesos de formación. Si aún existe cierto
temor a involucrar procesos de formación virtual o aprovechamiento de algunas
herramientas Web en las aulas, mucho más es el temor por dar ingreso a
los dispositivos móviles en el aula.
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